Karolay Andrea Martinez-Serrano, Katherine Peña-Guevara, Sebastián García-Méndez, Yuly
Andrea Ramírez-Sierra
I+D Revista de Investigaciones ISSN 2256-1676 / ISSN en línea 2539-519X
Volumen 16 Número 2 Julio-Diciembre de 2021 pp. 18-25
21
oficial de la organización, este rol es importante, debido a
que los medios exigen cada vez más información.
Roles de decisión: Los roles de decisiones se clasifican en
rol emprendedor, busca oportunidades en la organización
y crea y evalúa nuevos proyectos de mejora para la
empresa; rol de manejo de dificultades, visible cuando se
deben tomar decisiones en posibles problemas y cambios
que se presentan en la organización; rol de asignación de
recursos, asignación de rubros, tales como dinero, equipo,
personal, tiempo; rol de negociador, representar a la
organización en las negociaciones que se presenten.
Método de medición de roles administrativos
El método de medición de los roles administrativos es
diverso, para tal fin se precisa que en la presente
investigación se utilizó el cuestionario propuesto por
Fierro Cornejo (2015), el cual contempla las dimensiones
interpersonales, informativas y decisorias.
Cultura Organizacional
La cultura organizacional se relaciona con el conjunto de
diversas creencias, valores, hábitos, tradiciones existentes
en los diferentes grupos de las organizaciones
permitiendo determinar cómo se encuentra en
funcionamiento una empresa, para ello se analizan las
estrategias utilizadas, la estructura y sistema de cada
organización. Es importante que una organización cuente
con valores y normas para que cada una de las personas
que la conforman estén identificados con ellos y tengan
conductas y actitudes positivas que incrementen la
productividad y proyecten una imagen positiva de la
empresa ante la sociedad. Algunos investigadores
comparan la cultura organizacional con un iceberg, en el
que la parte que se encuentra a la vista es la cultura y parte
oculta del iceberg significa los factores internos de las
organizaciones (Arriola Miranda et al., 2011; Cantillo,
2013; Jaime Santana & Araujo Cabrera, 2007).
Características
Según Llanos Encalada et al. (2016), las características
son las que diferencian la cultura organizacional de otras
culturas, entre ellas las más representativas son la cultura
de identidad, la interacción, las personas, el control y el
sistema abierto. La cultura de identidad, es determinada
mediante las experiencias que han adquirido a través de
los años, y es adaptada a cada uno de los individuos de la
organización, adicionalmente los trabajadores que
ingresan a la empresa no conocen el funcionamiento a
detalle y con el tiempo van aprendiendo, conociendo la
cultura empresarial y el grado en el que cada empleado se
identifica con labores y con la cultura de los compañeros.
El segundo, la interacción, esta interfiere que en la cultura
organizacional se adquieren las interacciones y los tratos
que los empleados conllevan entre sí, por ende, las
interacciones y relaciones mitigan las situaciones
problemáticas y permiten un mejor rendimiento. El
tercero describe a las personas, característica fundamental
para la compañía pues las personas son parte fundamental
de esta, y las experiencias de cada individuo contribuye a
la creación y mantenimiento de la cultura organizacional
que se fortalece con el paso del tiempo.
Por su parte, el cuarto tipo hace referencia al control, este
comprende el nivel de seguimiento de reglas que rigen a
la compañía para que todo funcione de forma coordinada,
ordenada e interdependiente. Finalmente, el quinto
referido al sistema abierto, que indica que es casi
imposible que exista más de una cultura que predomine
en la empresa y que puede existir subculturas entre los
empleados, por ello se debe optar por la existencia de una
cultura global que sea conocida y compartida por cada
uno de los integrantes de la empresa, es importante que
todos la reconozcan y aprueben.
Tipos de cultura organizacional
La cultura organizacional tiene una clasificación de
tipologías diversa, por tanto, Harrison (1972) precisa que
la categorización depende de los objetivos empresariales
y valores de las compañías (Ollarves, 2006; Valenzuela-
Martínez, 2015), proponiendo cuatro tipos de
orientaciones:
− Organizaciones orientadas al poder: Las empresas
que conforman esta tipología tienen como objetivo
primordial la competitividad empresarial (García
et al., 2020), pues los valores están orientados a
fortalecer la posición en el mercado, por lo tanto,
suelen tomar decisiones mediante un directivo con
autonomía y suficiente control sobre cada uno de los
empleados.
− Organizaciones orientadas a la norma: Se encuentran
empresas, enfocadas en garantizar su estabilidad y
seguridad o basadas en el cumplimiento riguroso de
las normas y responsabilidades que cada persona
tiene en el puesto de trabajo, y buscan garantizar el
correcto funcionamiento del proceso y procedimiento
llevado a cabo en la organización.
− Organizaciones orientadas a los resultados: Son
aquellas organizaciones que se enfocan en ser cada
vez más eficaces en el desarrollo de los procesos que
realizan, la visión se guía a la reducción de costes y
el cumplimiento de cada uno de los objetivos
empresariales en el menor tiempo posible, pero con
la mayor eficacia que pueda generar, por ello las